Tanto en México como en otros países, las funciones de este van más allá de la simple evaluación de productos y la degustación de alimentos, si no que también funge como la cara pública de una marca y tiene la autoridad para publicitar a un fabricante y sus productos tanto dentro como fuera de un punto de venta.
¿Qué hace un promotor de autoservicio?
- Prueba el producto
Ofrecer muestras de productos, alimentos o degustaciones es, como la mayoría de la gente supondría, uno de los servicios más importantes e influyentes para los clientes, ya que estar cerca del producto y de un representante de la marca puede alterar la decisión de compra del cliente e influirle para que elija su producto.
- Informa a los consumidores y responde inmediatamente a sus preguntas
Este debe ser capaz no solamente dar una prueba, sino también de educar al consumidor sobre una determinada marca y el producto que se anuncia, proporcionar información convincente para despertar el interés por la compra y estar preparado para disipar las dudas.
Si lleva a cabo esta tarea, mejorará tanto el compromiso como las ventas.
- Permite la mejor colocación posible del producto en las estanterías y vitrinas
Además de estar en el punto venta, cara a cara con el cliente y promocionando un producto, debe asegurarse de que hay existencias suficientes en los estantes, de que no hay roturas de producto, de que el nombre de la marca y del producto es visible, entre otras cosas.
- Comprobar la situación del suministro
Debe comprobar el almacén para asegurarse de que hay suficiente mercancía para satisfacer la demanda, informar de cualquier discrepancia y comunicar al jefe de almacén si se necesitan más existencias.
- Mantener la limpieza del expositor
Para no presentar una imagen de marca negativa y evitar que el cliente desarrolle desconfianza al ver una zona sucia o mal dispuesta, cada promotor debe mantener limpios el espacio y los productos expuestos tanto en el lineal como en lugares adicionales.
En conclusión, el trabajo de este especialista es algo más que ponerse delante de un cliente y recitar un discurso preparado sobre un determinado producto. También debe proteger los intereses de la marca a la que representa, perfeccionando habilidades específicas que le permitan conectar con los clientes, influir en ellos y convertirlos en clientes potenciales.
Además, siempre debe desprender carisma, conocer a fondo las características de un determinado producto, saber interactuar y conversar con los clientes y el personal de la tienda, cumplir sus objetivos y ser capaz de tomar decisiones acertadas.
